Antes de que te hagan una episiotomía es interesante que sepas qué es

Seguramente habrás escuchado muchas veces esta palabra y, es muy probable, hasta en tu plan de parto contemples las posibilidad de que te la hagan pensando que es lo normal al dar a luz. Queremos contarte varias cosas que creemos que serán de tu interés.

 ¿Qué es exactamente la episiotomía?

Es un procedimiento quirúrgico que comprende el corte del perineo (piel y músculos entre la vagina y el ano) durante el trabajo de parto para agrandar el canal vaginal. Este procedimiento se realiza con tijeras o con un bisturí y requiere que después lo cosan. Hace años que la Organización Mundial de la Salud ha prevenido contra su uso rutinario y generalizado en los hospitales.

 

¿Qué complicaciones tiene?

 

  • Desgarros grandes. Después de una episiotomía se pueden producir desgarros grandes desde la incisión hasta el ano.
  • Pérdida de sangre. Una episiotomía corta todas las capas de tejido y músculo y puede producir sangrado excesivo y hematomas.
  • Infección. La incisión y las suturas exponen a infecciones bacterianas.
  • Relaciones sexuales dolorosas. Estudios recientes muestran que una episiotomía puede aumentar el dolor durante las relaciones sexuales; dejar marcas en la piel, asimetrías o estrechez del introito.
  • Cicatrización dolorosa y molesta. Las episiotomías no cicatrizan ni se reparan mejor que los desgarros. Con frecuencia tardan más en sanar porque la incisión es, por lo general, más profunda que un desgarro natural.
  • Prolapso vaginal, rectovaginal o fístula anal.

Hechos sobre la episiotomía. Mitos a desterrar. Mentiras que, a base de repetirlas, cobran aspecto de verdad.

 

  • Las episiotomías no previenen desgarros en o a través del esfínter anal ni desgarros vaginales. De hecho, los desgarros profundos casi nunca ocurren cuando no se realiza una episiotomía.
  • Aún cuando se reparen correctamente, los desgarros del esfínter anal pueden causar problemas crónicos de dolor coital o incontenencia fecal o de flatulencia a lo largo de la vida. Además, las laceraciones anales predisponen a las fístulas rectovaginales.
  • Si a una mujer no se le hace una episiotomía y sufre un pequeño desgarro, éste no será (con raras excepciones) peor que una episiotomía.
  • Las episiotomías no previenen la relajación de la musculatura del suelo pélvico. Por lo tanto, no previenen la incontinencia urinaria ni mejoran la satisfacción sexual.
  • No es más fácil reparar una episiotomía que un desgarro. Las episiotomías no sanan mejor que los desgarros.
  • Las episiotomías no son menos dolorosas que los desgarros. Pueden causar problemas prolongados de dolor, especialmente durante las relaciones sexuales.
  • Las episiotomías no previenen lesiones durante el nacimiento ni daño cerebral del feto.
  • Las epidurales aumentan la necesidad de una episiotomía.  También aumentan la probabilidad de que se usen instrumentos durante el alumbramiento.
  • La posición de litotomía aumenta la necesidad de una episiotomía, probablemente porque el perineo está demasiado estirado.

¿Qué puedes hacer para conservar el periné intacto?

 

  • No permitas que te metan prisa o te administren hormonas como la oxitocina sintética sin una indicación válida.
  • Adopta posturas que favorezcan el expulsivo: en cuclillas, de pie…
  • No empujes sin ganas y cuando sientas deseos de empujar, relaja cuanto puedas el suelo pélvico para que el expulsivo sea suave.
  • La episiotomía profiláctica es un acto de mutilación inútil y doloroso.
  • la inducción del parto, la inmovilización en posición acostada, la epidural, la oxitocina sintética, los pujos dirigidos y la extracción por fórceps son las principales causas de los desgarros graves que la episiotomía pretendería prevenir.